Sábado, Distrito Federal

(Si, eso se lee cantando)

Efectivamente mis estimados lectores, visitantes, asiduos, fanes y público en general, tal y como lo recita aquella célebre canción del aun más célebre Chava Flores, mañana amanezco en el De Efeeeeeeeeeee (léase con tiplecito).

Les diría que este aviso se hace con fines de que no se preocupen por mi ausencia en este espacio (que es su espacio), pero la verdad soy tan poco constante que apenas si se notará que he salido. En todo caso más bien mi partida se verá reflejada en que tomaré mi tiempo para responder las mentadas de madre que tengan a bien dejar en los comentarios de los diversos posts que aquí someto a su ilustre consideración. Pero no tema, tarde o temprano me daré por notificado de que a usted opinado sobre mi ascendencia.

¿Qué les puedo decir? Tengo la típica euforia que me da cada que voy a salir con Estef, una sensación de inquietud porque ya quisiera estar allá y al mismo tiempo un enorme pesar porque aun no me puedo mover de este H. changarro.

Cada vez que acudo a visitarla es un viaje… literalmente, duh… ok, veamos… una experiencia pues. Como la ocasión en que al irme en avión, en los asientos de la misma fila pero del otro lado del pasillo había tres alegres maricones jotos pulmones mariachis jois “diversos” (que difícil es esto de ser polites, me cai) que circunstancialmente coincidió que también iban vestidos totalmente de negro. Entonces la sobrecargo me pregunto que si iba con ellos. Entonces yo respondí que no, pero ellos ni tardos ni perezosos añadieron: “porque no quieres, papacito"

Una vez, me fui en camión y sucedió que no pude dormir ni cinco minutos en todas las siete horas que dura el trayecto y como iba de madrugada, los culeros de reconocida línea que autobuses (cuyo nombre no diré nomás para no quemar a los ojetes de ETN) estimaron que no era necesario poner ninguna película, ya que todos iban a ir dormidos… pos no todos íbamos dormidos, CABRONES!

Esta noche repito experiencia en autobús y he tomado mis precauciones. Llevo el iPod con carga completita para el caso en que aun pongan el audio de las películas en audio general y no a través de los audífonos. Llevo somníferos en caso de que no pueda dormir y he comprado mi boleto en la fila individual para evitarme el riesgo de que el fulano de al lado me toque ratero o maricon joto pulmon mariachi jois “diverso”.

En fin, me despido por unos cuantos días, estaré viviendo realmente la vida lejos de mis cadenas habituales. Les deseo que su fin de semana sea tan bueno como sé que será el mio.

Abachiubechiu!!